En la globalidad del mundo hispánico y su extensión imperial en la modernidad, la configuración local de los gobiernos americanos debió más a la voluntad de la Corona que a los recursos locales que sostenían la estructura militar y política. En lo que respecta al Buenos Aires de esa época, este se ubicó en un margen de la administración en Lima y en Charcas, teniendo vedado el comercio por mucho tiempo. Para sustentar las condiciones políticas de la militarización, se precisaba de la comunicación vía navíos y de la paga para soldados y toda la guarnición militar.

Acercarse a la historia y conocer el antiguo Buenos Aires español, no es tarea sencilla, pues se debe disponer de las fuentes, ideas y preguntas correctas sobre lo acontecido en un poblado que empezó pequeño y creció hasta el momento de nuestra historia. Por medio de una perspectiva puesta en las periferias coloniales, se observa la relación de la metrópoli con las provincias, tales como Buenos Aires.

Desde la Historia y Arqueología, Marcelo Weissel en Navío de Aviso a Buenos Ayres reconstruye la historia de un navío llamado “Nuestra Señora de los Reyes, San Antonio y San Telmo”, nave de aviso que por fuerzas de la naturaleza o por propia voluntad decidió quedarse por siempre en Buenos Aires. Así, los vestigios que deja un naufragio o una nave abandonada años atrás constituyen un testimonio de su época de esplendor. Esos vestigios evocan sus mejores años de vida, sus historias, sus singladuras, encierran secretos de sus tripulantes y de las mercancías transportadas desde dónde, hacia dónde y para quién. Los restos “perdidos en tierra” son valiosos vestigios materiales de ese pasado que hoy se quiere evocar.

A partir de un conjunto de bibliografía actual y clásica, comparando fuentes documentales de diversos archivos nacionales e internacionales con restos arqueológicos, el autor hace una crónica de la pérdida de un navío de aviso, sucedida entre febrero y abril del año 1682 en el banco de entrada del canal del Riachuelo de los Navíos, puerto natural de la Ciudad de la Trinidad y puerto de Santa María de los Buenos Aires.

Esta obra sigue la historia de los navíos de la Carrera de Indias que llegaron y partieron de Buenos Aires durante el final de la década de 1670 y comienzos de 1680. La dinámica portuaria temprano colonial y los avatares de una ciudad puerto periférica en crecimiento son protagonistas de esta historia de los navíos de la Carrera de Indias, como también ocupan un lugar central los navíos de Aviso y los acontecimientos que se sucedieron en esa remota ciudad en dicha época. Con un prólogo por Emir Reitano, el libro cuenta, por lo tanto, con una introducción, un capítulo general y otro particular sobre el navío “Nuestra Señora de los Reyes, San Antonio y San Telmo”, una conclusión, un anexo (“Personas de época, roles y marchantas”), un apartado bibliográfico y, finalmente, un itinerario de los hechos.